¿Eres un fiel defensor del reciclaje? ¿Crees que dar un segundo uso a los materiales es una apuesta segura en el camino a la sostenibilidad?
No te vamos a hablar de la importancia de utilizar energías renovables o de separar la basura según sus cualidades. Hoy trataremos el reciclaje inmobiliario.
Sí, es posible reciclar inmuebles.
El reciclaje inmobiliario, o reurbanización hace referencia a darle una segunda vida a inmuebles a los que hasta ese momento se les había dado un uso diferente. Se trata de darle una nueva vida a propiedades urbanas o industriales que se han quedado obsoletas, vacías o infrautilizadas.
Seguro que conoces algún ejemplo: un antiguo molino reconvertido en restaurante, un monasterio que ahora es un Parador Nacional o una nave industrial que se transformó en vivienda de lujo.
Otro ejemplo muy popular son los lofts del Soho neoyorquino, que surgieron en los años 70 debido a la desindustrialización. La crisis provocó que muchas pequeñas fábricas y almacenes tuviesen que cerrar. Estos locales fueron adaptados a viviendas por artistas que necesitaban grandes espacios en los que trabajar.
No hay duda de que esta forma de construcción, cada vez más popular en el sector, ofrece múltiples ventajas:
- Disminuye el uso y gasto de nuevas materias primas.
- Es un sistema que se adapta a todo tipo de bolsillos, ya que también permite inversiones con presupuestos reducidos.
- Rejuvenece el aspecto y reaviva zonas deshabitadas aumentando el tejido industrial y poblacional en lugares carentes de vida.
- Ofrece exclusividad y ventajas estructurales. Imagina lo pintoresco de un alojamiento rural que con anterioridad fue una granja, o la elegancia de instalar un restaurante de lujo en un antiguo teatro.
Es posible que a estas alturas ya estés pensando en una de las formas de reciclaje inmobiliario del que más se habla en los últimos tiempos: transformar locales comerciales en viviendas.
Y es que es una realidad que cada vez podemos encontrar más locales vacíos en los centros de las grandes ciudades, y la lógica hace pensar que sería buena idea transformarlos en bonitos y céntricos lofts.
Por desgracia no es tan sencillo como comprar un local y planear una reforma.
Es más que probable que te encuentres con buena cantidad de trabas legales y técnicas.
En ningún caso sería buena idea adquirir una propiedad para darle un uso diferente al actual a no ser que tengas la total certeza de que obtendrás las licencias necesarias. Es por ello que debes asesorarte por técnicos y especialistas antes de embarcarte en un proyecto de este tipo.
Pero... ¿imaginas que tu casa fuese la antigua estación de ferrocarril de tu pueblo? ¡Nos encanta lo creativo que puede llegar a ser el reciclaje inmobiliario!
